23 abr, 2019 · Gregorio Arranz
Seguramente pensabas que, con crear tu tienda online, ya es suficiente para aparecer en las primeras posiciones… sin embargo, para encontrarte, tienes que pasar páginas y páginas de Google hasta que apareces en una de ellas si tienes suerte.
Este es uno de los primeros problemas a los que se enfrenta una nueva web o una tienda online en sus primeros meses de vida así que, con estas claves (y lo siento, no esperes el algoritmo de Google), mejoraremos el posicionamiento de tu tienda online y, con perseverancia y paciencia, conseguirás estar en esas primeras posiciones tan codiciadas.
Tendremos que apostar por palabras clave menos genéricas. ¿Por qué? Con la palabra clave “moda” va a ser difícil que nos posicionemos y que, con ello, nos encuentren gracias a ella. A no ser que seamos una tienda online ya consolidada como Zara o Mango, debemos buscar palabras clave propias por las que muy pocas tiendas online vayan a estar compitiendo. Si no somos un gran ecommerce, lo ideal, es utilizar una estrategia de “long tail”. Siguiendo nuestro ejemplo, en lugar de “moda” deberíamos apostar por palabras muy concretas que formen parte de las descripciones de nuestro producto “jersey amarillo hecho a mano”.
Lo ideal es tener una única palabra clave por producto y esta debe aparecer en el título (“title”) y en la descripción (“description”) de nuestra ficha de producto.
Y algo que nos ha demostrado la experiencia… un usuario que busca una palabra clave genérica en su navegador, será más reacio a comprar tu producto. Sin embargo, un usuario que busque un término más concreto muestra que, el interés de compra, es mucho mayor.
Google, cada día, analiza millones de páginas y, para cada una de ellas, tiene un tiempo limitado para analizarla. Si facilitamos a “la araña” el trabajo de análisis, dispondrá de más tiempo para poder analizar todo el contenido de nuestra web. Cuanto más contenido analice, nos posicionará a través de más palabras clave.
Para que Google optimice el tiempo que pasa en nuestra web es clave estructurar bien los contenidos, con sus etiquetas h1 y h2 (etiquetas de encabezado de HTML) en todas las páginas que sean capaces de describir lo que se va a encontrar en dicha página. Todos y cada uno de los productos deberán contener, tal y como comentábamos anteriormente, “titles” y “descriptions” que le sirvan para identificar esos productos y sus respectivas características.
– Nunca dupliques el mismo contenido en varias páginas. Por ejemplo, tener la misma descripción para dos productos diferentes, penaliza.
– Vigila los tiempos de carga de tu página. Google penaliza las páginas que tardan mucho en cargar y entorpecen el trabajo de “la araña”.
– Mobile first, si nuestra web no está pensada y diseñada para móviles, olvídate de aparecer bien posicionado.
– No uses h1, titles o descriptions que no tengan nada que ver con el contenido que luego se muestra en la página.
Y, sobre todo, usa el sentido común. Tienes que ver tu tienda como una tienda offline. Debes tener todo bien etiquetado, ordenado, con carteles indicando las categorías de producto… haz lo mismo en tu tienda online y Google recompensará ese esfuerzo.
26 mar, 2019 · Alejandro González Mata
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